El nuevo presidente de Argentina, Alberto Fernández, recalcó este martes que llega al poder para «convocar a la unidad de toda la Argentina» en pro del bienestar de toda la población, en especial de los más postergados, en medio de la grave crisis económica que arrastra el país desde 2018.
Fernández, que sucede en el cargo a Mauricio Macri, deberá enfrentar un complicado escenario económico marcado por la elevada deuda pública, una frágil moneda nacional, la subida constante de los precios y la escalada del desempleo y los niveles de pobreza.
En su discurso, Fernández dijo que Argentina «tiene la voluntad de pagar» su deuda externa, pero carece de «los medios para hacerlo», advirtió el presidente Alberto Fernández, al hacer un llamado al Fondo Monetario Internacional (FMI) para desarrollar una relación «constructiva y cooperativa» en su discurso de investidura este martes.